domingo, 17 de junio de 2012

De la Resistencia y otros mitos

Leyendo un poco mi Timeline de Twitter, me encontré con algunos comentarios relacionados con la difícil situación de los votantes venezolanos en el Estado de Florida (EUA). La decisión intimidatoria de que ahora estos paisanos deban votar a más de 1500 kilómetros de distancia complica la posibilidad de que los más de 20 mil votantes contribuyan con la jornada electoral del próximo 7 de octubre. El cierre del Consulado de Venezuela en Miami fue el factor que detonó este problema... Pero no es el único dolor de cabeza de nuestros compatriotas que habitan por esos lados.

Como es bien conocido, Miami se convirtió en un sitio de encuentro de muchos venezolanos que salieron del país por distintas razones que van desde "buscar un futuro mejor" hasta el exilio político; y aunque parezca raro, no pocos de los que se fueron apoyan al gobierno venezolano actual -esto sí que no lo entiendo, creo-, el punto es que allá convergen muchas maneras de pensar, y pareciera que todas están bien enlazadas. Pues no es así.

En Miami se encuentran varias organizaciones -no voy a mencionarlas para no darles promoción pero ya ustedes saben de quiénes hablo- que se autodenominan "de resistencia civil". Estos grupos tienen su origen aquí en nuestro país, desde la época del paro de diciembre de 2001, pasando por los sucesos de abril de 2002 y el posterior paro de diciembre 2002-febrero 2003. Se identifican como opositores radicales. En una época tenían muchos seguidores, quienes con marchas, cacerolazos, pitazos y protestas se hicieron sentir dentro y fuera de nuestras fronteras.

En el año 2005 tuvieron una influencia importante en la decisión de no postular candidatos de oposición en las elecciones parlamentarias de ese año. Se abogaba por una deslegitimación de los poderes públicos y en la aplicación -no explicada por nadie, ni por el TSJ- de los artículos 333 y 350 de la Constitución. ¿Cuál fue el resultado? Una asamblea 100% roja rojita en aquel momento.

7 años después, cuando la gran mayoría de los venezolanos concluye en que esa decisión de no participar en las parlamentarias de 2005 fue el peor error que se pudo haber cometido, y que la nueva estrategia es la unidad de los partidos en torno a candidatos específicos, se siguen escuchando los alaridos de los "abanderados" de la desobediencia civil, claro, desde alláaaaa lejos. Todavía mantienen el discurso -casi un mito- de que "la única forma de derrocar al régimen es no asistiendo a las urnas, aplicar el 350, pedir auxilio internacional y conmocionar a los cuarteles". Lo más curioso es que aquí aún queda gente que apoya estas "medidas". Pero cuando les preguntas "¿Cómo se hace todo eso?" ni ellos mismos te saben explicar. Bueh...

Vamos por partes. ¿Ustedes conocen una organización llamada Resistencia Civil? Está aquí, hacen ruedas de prensa una vez a la cuaresma. Ellos tienen este mismo discurso. Pero... ¿Se han fijado que en el único sitio en el que aparecen declarando es en VTV? Sí, me van a decir que en los otros medios los censuran, que las cúpulas de los partidos tienen sus intereses, lo que sea. Si es una organización que está CONTRA EL GOBIERNO no deberían declarar en un canal ABIERTAMENTE DEL GOBIERNO. Si quieres hacer llegar tus mensajes das papelitos en la calle, pegas afiches, montas graffittis clandestinos, qué sé yo. A veces pienso que estos tipos son infiltrados. Se han visto casos, como el de un loquito que anda en Twitter y que le dicen el águila no-sé-qué-cosa. Ese es más rojito que cualquiera de los que se la pasan en la Esquina Caliente.

Lo mismo pasa con estos grupos en el extranjero. Ahora se la pasan peleando con los paisanos que ya dijeron "me voy pa'New Orleans porque voy a votar", con la excusa de que se está legitimando a un organismo viciado como el CNE. Aquí me pregunto yo: ¿Y ya no tuvieron su oportunidad y no hicieron un carrizo? Ahí está el paro de 2002. No sirvió. Ahí están las parlamentarias de 2005. ¿Sirvió de algo no votar? No. Ahora vienen las presidenciales. La cosa está uno contra uno. ¿Que no te gusta el candidato porque no habla, no tiene carisma y es feo? Bueno, vota por el otro que habla bastante, que es un líder carismático y que es más feo aún. Aquí se hicieron unas primarias. Los dos candidatos que promovían el radicalismo (Pablo Medina y Diego Arria) no sumaron ni siquiera 50 mil votos. El candidato "sin carisma" obtuvo más del 60% del voto opositor -que no fueron 500 mil personas, sino más de 3 millones-, contra poco más de 860 mil que obtuvo Pablo Pérez, con más carisma y labia -que por cierto, lo veo como un buen candidato presidencial a futuro- y eso es porque aquí el problema no es si el candidato es bonito, es cuchi, habla golpeado, dice groserías o insulta al chavismo. El asunto está en instaurar un nuevo gobierno que sustituya a los 13 años y piquito de este arroz con mango que ahora llaman Socialismo del Siglo XXI. Si recuerdan bien, hace casi un año apareció un tipo que decía ser el candidato de los NiNi, que estaba contra el gobierno pero también contra la oposición. Aparentaba ser el candidato de estos grupos radicales. Estoy seguro de que les pregunto el nombre de este tipo y nadie lo sabe. Nadie lo conoce, ni en Miami, que fue donde empezó su campaña electoral. Al final no se inscribió. Obvio, ya la gente está harta de la confrontación absurda.

Ahora bien, ¿Por qué estos grupos actúan como divisionistas? Los venezolanos en el extranjero presumen que el propio gobierno actual les da el status que tienen ahora. Me explico, les conviene que el gobierno continúe para así ellos tener razón de ser como grupo-secta, y de esta manera tener cierta exposición. En caso de que ganara Henrique Capriles y se reemplace el esquema gubernamental actual, esos grupos pasarían al olvido de inmediato. Señores, si hablamos de la ceguera roja y la criticamos, también debemos repudiar la ceguera negra -no azul, ellos se visten de negro- pues es tanto o más dañina para quienes queremos una democracia tranquila.

Ya muchos de nosotros les hicimos caso. Metieron la pata, no funcionó nada de lo que nos propusieron. Ahora ustedes deberían, en nombre de la patria que dicen defender, dejarse de estupideces, renunciar a sus ideas llenas de egolatría y a utopías de Yugoslavia u otros regímenes que cayeron por vías de resistencia imposibles de aplicar en un país tropical como el nuestro, deberían cerrar el pico y unirse a todo el montón de gente que decidió que vamos a ir a votar, a donde sea, como sea, por un solo candidato. No crean que la historia condenará solo a los rojos, sino a todos aquellos que en vez de intentar unir, dividieron... gracias a Dios creo que no tuvieron éxito. En fin, nada de rendirse ni de creer en esos mitos de hace 10 años. Vamos todos juntos y firmes. Bien lo decía un señor bajito que vivió hace muchos años y que se llamaba Simón Bolívar: "Dios concede la victoria a la constancia". Amén.

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